La Delegación del Frente Nacional en Asturias contempla con optimismo el resultado del reciente referéndum celebrado en Suiza con el resultado de una mayoría favorable a la prohibición de la construcción de minaretes en dicho país europeo.
Así mismo apoyamos las declaraciones del filósofo y catedrático emérito de la Universidad de Oviedo, Gustavo Bueno, al señalar que: «Una mezquita, además ser un elemento discordante en lo que se refiere a la estética de la ciudad, tiene un componente agresivo y activo. No nos olvidemos que desde una mezquita un señor puede ponerse a gritar que ha empezado la Guerra Santa».
Por el contrario rechazamos tanto las declaraciones realizadas por el abad de Covadonga, Juan José Tuñón al comprender con una tolerancia suicida, a nuestro entender, “que la comunidad musulmana residente en Asturias quiera un lugar de culto, una mezquita.”, como los argumentos basados en la condena que el mismo Vaticano ha realizado lamentando el resultado del referéndum suizo.
El Frente Nacional recuerda a la Iglesia Católica que el Islam ha sido el mayor enemigo ancestral del cristianismo y en especial del catolicismo, y que precisamente en tierras astures, en Covadonga, comenzó la Reconquista contra el Islam, religión que en raras ocasiones se ha caracterizado por la tolerancia con otras confesiones religiosas.
Para terminar, criticamos la hipocresía de la presidenta asturiana de la asociación S.O.S Racismo, Carmen Prado, al considerar el resultado del referéndum de los suizos “como una cuestión xenófoba”.
El Frente Nacional considera el resultado mayoritario a favor de la prohibición de la construcción de minaretes como un síntoma obligado del despertar de la lucha por la Identidad europea, una Identidad ajena al Islam y de la lucha contra la creciente invasión de inmigrantes que tanto España (y Asturias es su cuna) como el resto de países europeos está sufriendo.
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